martes, 16 de noviembre de 2010

DESCRIPCIÓN GENERAL

MEMORIA
El cementerio de San Pedro es el único cementerio-museo que hay en Colombia construido en 1842 como último hogar de las familias ricas en Medellín, fue declarado patrimonio arquitectónico y cultural en 1999.
Sus bóvedas y mausoleos son conocidos en Medellín, pues allí reposan personajes ilustres como Fidel Cano, Mariano Ospina Rodríguez, Pedro Nel Ospina, Pedro Justo Berrío, Carlos Coriolano Amador, Efe Gómez, Luis López de Mesa, Félix de Bedout Moreno, Manuel Uribe Ángel, Francisco Antonio Cano, Marco Tobón Mejía, Pedro Nel Gómez; entre otros.
Aunque corresponde a la categoría de obras escultóricas y arquitecturas representativas del arte funerario, el espacio ha comenzado a perfilarse como un nuevo lugar de encuentro para la difusión artística, ya que en algunas noches se organizan eventos en los cuales se celebran conciertos, obras de teatro y danza, o espectáculos de narración oral. Pero lo que verdaderamente se destaca de este sitio cultural son las esculturas creadas en memoria de figuras destacadas de la historia de Colombia.

SITUACIÓN ACTUAL

A lo largo de su historia, el Cementerio de San Pedro se transforma en cuatro períodos, que aunque ninguno pasa aislado del otro, se convierten en los eslabones fundamentales para estudiar y resumir nuestro pasado. El primer momento, llamado ‘verde’ comprende desde el año de su fundación hasta 1900 donde predomina solamente el trazado, el muro circular, y una vegetación compuesta por palmas reales y especies nativas. Luego durante los años de 1900 a 1940 se ve la llegada de mausoleos y esculturas en mármol, importados desde Italia y la huella de familias burguesas que empiezan a ocupar el Cementerio, conocido como la ‘ciudad blanca’. El tercer período comprenderá desde la década de los años 40 hasta los 80, donde emerge un estilo moderno inspirado por expresiones internacionales con el uso de materiales como el concreto, granito y diferentes tipos de piedra nativa.
El cuarto período nos permite ver la emergencia de una clase social con rasgos claros de popularidad y un estilo marcado por una connotación postmoderna. En está época, marcada por el narcotráfico, llega al Cementerio de San Pedro una estética efímera donde el uso de colores, ornamentación constituido por cartas, arreglos florales, cintas, calco manías de equipos locales de fútbol e iconos religiosos nos habla de ese proceso de hibridación en donde las fronteras de lo sagrado, profano, público e íntimo, se han difuminado otorgando un escenario rico en simbología y digno de estudiar la historia de Medellín reflejada y contenida en este espacio.
Al examinar de cerca las diferentes etapas por las que ha pasado la historia y el desarrollo de Medellín, encontramos en el Cementerio de San Pedro, una pequeña ciudad, que en sus aspectos arquitectónicos, artísticos y sociales, marca un sinnúmero de historias, ritos y símbolos de más de siglo y medio de vida.